Generan polímeros biodegradables con almidón de plátano macho
¿Te imaginas que el plátano macho sirviera para conservar otros alimentos y evitar que se oxiden? Si ya eras fan de los plátanos fritos, la Universidad de Papaloapan puede hacer que ames más a los plátanos machos.
El plátano macho es la materia prima que están utilizando investigadores de la Universidad de Papaloapan (UNPA) campus Tuxtepec para desarrollar películas biodegradables que se adhieren a los alimentos a partir del almidón de esta fruta.
Estas películas tienen propiedades antimicrobianas y antioxidantes destinadas a la conservación de alimentos. Es decir, protegen a los alimentos retardando el proceso de degradación.
Los investigadores utilizan los residuos del plátano, es decir, la cosecha que no se consume o que no alcanzó la maduración necesaria. Que las películas estén hechas con la producción de plátano que no puede ser comercializada, le agrega un valor extra al proyecto, señala el Dr. Erick Juárez Arellano, profesor investigador de la UNPA.
Plasti-plátano
La aplicación principal de las películas es para el empaque y conservación de alimentos, para los que comúnmente se utilizan plásticos o polímeros de difícil degradación, lo que impacta de forma negativa al medio ambiente y tienen un mayor costo de producción.
Las películas de plátano deben cumplir con tres requisitos principales:
- Una propiedad mecánica adecuada que le permita ajustarse al peso y elasticidad del alimento en el que se va a usar
- Una propiedad biodegradable
- Y una propiedad antioxidante que permita la conservación de las propiedades nutrimentales del producto
“El problema con los polímeros es que no se degradan, pueden pasar miles de años y se siguen acumulando, lo que se traduce en contaminación ambiental. La idea con estas películas es que ciertos organismos las degraden y posteriormente sirvan como abono. En las pruebas que hemos realizado obtuvimos como resultado la degradación de la película de plátano macho en 3 meses, mientras que un polímero sintético tarda de cien a mil años”, explica el Dr. Juárez, miembro nivel I del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y experto en ciencias e ingeniería de materiales.
La generación de películas consiste en un proceso químico en donde el almidón se rompe, liberando las cadenas de este y generando su dispersión. Posteriormente, se controla la reestructuración con lo que se obtiene el polímero. Se puede utilizar un método semiindustrial para construir las películas para luego proseguir con la caracterización de la actividad biológica.
Es importante destacar que el desarrollo de esta investigación es posible gracias a la colaboración entre dos grupos académicos de la UNPA y el Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA) que conforman la red Aprovechamiento sostenible de recursos naturales y generación de productos de alto valor agregado, financiada por el Programa para el Desarrollo Profesional Docente (Prodep), y que de manera conjunta continúan trabajando en la elaboración de películas biodegradables.
El equipo de investigadores de la UNPA está explorando las posibilidades de crear películas y polímeros con otras variedades de plátano, porque cada una tiene un almidón diferente. Esta tecnología podría ser aplicable a tubérculos como la papa y la yuca también.
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