L. en N. y ED. Héctor Infanzón
Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición
“Salvador Zubirán”
En términos generales, se recomienda que todos los grupos de edad sigan un patrón de alimentación adecuado que cumpla con las siguientes características:
Lo anterior, tiene la finalidad de mantener un buen estado nutricio y de salud, sobre todo si con los alimentos logramos cubrir nuestro requerimiento energético. Es decir, el número de kilocalorías que necesitamos consumir diariamente para realizar todas nuestras actividades y mantener un peso adecuado. La cantidad de calorías necesarias dependerá del sexo, la edad, el peso, la estatura y el nivel de actividad física de cada individuo.
Es importante puntualizar que, si existe un balance energético positivo, es decir, que el consumo de energía (kilocalorías) a través de los alimentos es mayor que el gasto de energía a través de las diferentes actividades que se realizan durante el día, el efecto directo en el organismo es aumentar peso a expensas de grasa, representando un factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades crónico degenerativas (sobrepeso, obesidad, diabetes tipo 2, hipertensión arterial, dislipidemias).
Ahora bien, ¿cómo los edulcorantes no calóricos (ENC) podrían contribuir para evitar el balance energético positivo y formar parte de un patrón de alimentación adeciado? Primero, es importante que sepamos que los ENC son sustancias que se utilizan en dosis pequeñas y tienen la capacidad de potencializar el dulzor de los alimentos y bebidas, con un aporte energético mínimo o nulo y sin afectar los niveles de insulina o glucosa en sangre.
Por lo anterior, existen datos y revisiones que afirman que los ENC pueden utilizarse para evitar o disminuir el consumo de azúcares añadidos (azúcar de mesa, fructosa, miel, etc.) y, con ello, favorecer la reducción del consumo energético y la pérdida o mantenimiento de peso, acompañado de las recomendaciones anteriores para llevar un plan de alimentación saludable, de acuerdo a los gustos y objetivos de salud de cada individuo.
La población en general e incluso los profesionales de la salud han puesto en juicio si el consumo de los ENC resulta benéfico o bien, produce alguna afectación al estado de salud de los individuos, por ello, en México la Sociedad Mexicana de Nutrición y Endocrinología ha elaborado un documento de posición sobre el uso de los ENC con base en un análisis de la evidencia científica actual que demuestra que su consumo no representa un riesgo, siempre que se considere la ingesta diaria admisible (IDA) de cada uno de ellos y el estado de salud o etapa de vida de cada individuo.
En ese sentido, es importante que los nutriólogos brinden orientación alimentaria a la población en general o con alguna condición particular (sobrepeso, obesidad, diabetes, etc.), para dar a conocer de qué forma y en qué cantidad se pueden consumir los productos alimentarios que contengan ENC.
Como parte de lo anterior, se enlistan algunos alimentos y bebidas que suelen tener una versión que contienen edulcorantes con el fin de disminuir el consumo de azúcares añadidos. A pesar que en algunos casos la diferencia no es mucha, nos puede servir como guía para tomar decisiones saludables al momento de elegir alimentos y con ello “ahorrar kilocalorías extras”.
Producto alimentario | Versión ordinaria | Versión con ENC | ||
Edulcorante usado | Kilocalorías por porción | Edulcorante usado | Kilocalorías por porción | |
150g de yogurt griego con fruta | Azúcar, almidón modificado, sucralosa | 193 kilocalorías | Estevia, acelsufame k y sucralosa | 92 kilocalorías |
Barra (1 g) de chocolate con leche | Azúcar y sólidos de leche | 84 kilocalorías | Sucralosa y acelsufame K | 77 kilocalorías |
1 taza (200ml) de gelatina de fruta | Azúcar | 64 kilocalorías | Aspartame y acelsufame K | 7.6 kilocalorías |
600ml de refresco sabor manzana* | Azúcar y jugo concentrado de manzana | 240 kilocalorías | Aspartame y acelsufame k | 0 kilocalorías |
3 piezas de galletas con chispas de chocolate | Azúcar | 138 kilocalorías | Sucralosa y acelsufame K | 135 kilocalorías |
3 cucharadas de granola con frutas deshidratadas | Azúcar, miel de abeja, azúcar mascabado | 117 kilocalorías | Sucralosa | 125 kilocalorías |
1 pieza de mini oblea de cajeta | Azúcar y jarabe de maíz | 124 kilocalorías | Sucralosa | 37 kilocalorías |
1 litro de agua de jamaica o limón* | Azúcar de mesa | 480 kilocalorías | Sucralosa | 0 kilocalorías |
125g de yogurt natural | Azúcar, almidón modificado | 91 kilocalorías | Sucralosa y acelsufame k | 58 kilocalorías |
*Nota: Las guías alimentarias para población mexicana no recomiendan el consumo de bebidas con ENC, sin embargo, en caso de que se ingieran no se deberá exceder de 2 vasos al día, es decir, 480ml aproximadamente.
Asimismo, es de utilidad conocer los ENC que comúnmente se utilizan en México, los cuales encontraremos enlistados en los ingredientes de las etiquetas de información nutrimental de todos los alimentos y bebidas: acelsufame-k, sucralosa, aspartame, sacarina, ciclamato y glucósidos de esteviol (estevia).
Sin duda, los ECN son una alternativa en la alimentación de la población en general y pueden formar parte del tratamiento nutricio en personas con diabetes, y como apoyo en el manejo del sobrepeso y obesidad. En lugar de tomar la decisión radical de usarlos o no, se debe orientar a los individuos para que la toma de decisiones con respecto a qué alimentos o bebidas elegir, sea con base en los objetivos individuales, siempre promoviendo que lo principal sea la adquisición de hábitos de alimentación adecuados que ayuden a mantener un óptimo estado de salud.
Referencias bibliográficas: