Cargando

Escriba aquí

¿Sirven los antioxidantes en los alimentos para el cáncer de próstata?

Dr. Víctor Daniel Boone Villa 

Escuela de Medicina Unidad Norte de UAdeC

Dra. Janeth Margarita Ventura Sobrevilla 

Escuela de Ciencias de la Salud de la Unidad Norte UadeC

El cáncer es uno de los problemas de salud pública importante a nivel mundial, afecta a todas las edades y todas las partes del cuerpo humano. Particularmente, hablaremos sobre el cáncer de próstata, pues está dentro de los 10 principales tipos de cáncer que afecta a la humanidad. Cada año aumenta el número de casos nuevos que se registran en los sistemas de salud. De todos los tipos cáncer reportados para los hombres, el cáncer de próstata es de los más frecuente (prevalencia) y su incidencia, según los datos del Observatorio Global de Cáncer de la de Organización Mundial de la Salud del 2020, fue de 14.1%, con una mortalidad de 3.8%. Otro dato importante es que, aunque el cáncer de próstata es el más prevalente e incidente, no es el más mortal, ya que mueren más hombres por cáncer de pulmón, hígado, colon-recto y estómago que por afectación de la próstata. Si a una persona con riesgo bajo o moderado de presentar cáncer de próstata se le detecta y trata esta enfermedad en etapas tempranas, tiene una esperanza de sobrevivir por 10 años del 99%. 

El cáncer de próstata es una enfermedad compleja, en donde las células de nuestro cuerpo sufren alteraciones en su material genético a través de fusión, amplificación, deleción y mutaciones de algunos genes. Las alteraciones claves incluyen la fusión del gen TMPRSS2 con genes de la familia ETS, la amplificación del oncogen MYC, la deleción y/o mutación del gen PTEN y TP53 y, en una enfermedad más avanzada, la amplificación y/o mutación del receptor de andrógeno.

Durante el desarrollo del cáncer las células sufren varios cambios como: inestabilidad del genoma (genes alterados), hiperproliferación (células que se reproducen mucho), inmortalización (células que no mueren), alteración en la angiogénesis (generación de vasos sanguíneos), metástasis (células que salen de su lugar y se van a otra parte de cuerpo).  

Las células humanas normalmente generan sustancias oxidantes conocidas como sustancias reactivas de oxígeno o ERO (ROS en inglés) y algunas pueden ser radicales libres. Las principales ERO del tipo radicales libres son el superóxido (O2·) y el hidroxilo (OH·) y, como ejemplo de una molécula no radical, está el peróxido de hidrógeno H202. Las ERO tienen un papel importante, se necesitan para que el cuerpo funcione correctamente. Se producen en varias partes de la célula, como en la mitocondria durante la fosforilación oxidativa en el proceso de respiración celular, en los peroxisomas cuando ocurre la oxidación de lípidos (grasas y aceites) y en el retículo endoplásmico a través de la oxidación de las proteínas.

Sin embargo, también existe un sistema de “defensa” antioxidante donde encontramos enzimas como la catalasa, superóxido dismutasa, glutation peroxidasa, glutation reductasa, peroxideroxina entre otras, por lo que la célula se encuentra en un estado de equilibrio entre los oxidantes y antioxidantes que produce. El problema se genera cuando el equilibrio se rompe, a esto se le conoce como “estrés oxidativo”. Es decir, se generan más oxidantes que antioxidantes, justo es lo que pasa en el desarrollo de cáncer. En condiciones metabólicas normales cada célula se expone a 100 y 150 mil oxidantes al día. Pero, en el desarrollo del cáncer se tiene un metabolismo alterado que genera estrés oxidativo. 

Recordemos que en el cáncer existe hiperproliferación e inmortalización celular, es decir, se generan muchas células que se encuentran metabólicamente activas provocando que se consuma más glucosa para formar más piruvato (aumenta la glucólisis) y este piruvato es oxidado en la mitocondria y se incrementa la producción de ERO (efecto Warburg). En los tumores (concentración de masa celular) se generan centros de hipoxia debido a que existen menor cantidad de vasos sanguíneos, por lo que se reduce la oxigenación. Otro fenómeno asociado es el incremento del receptor y de la actividad de la región oncogénica de algunos genes. Como resultado se da el aumento de ERO que ocasiona oxidación de azúcares, lípidos, DNA y proteínas, incluyendo la oxidación de enzimas antioxidantes por inestabilidad genética.

El Instituto Nacional de Cáncer (INC) del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos, menciona que la medicina complementaria y alternativa (MCA) es un tipo de tratamiento con respecto al tratamiento estándar que pude usarse de manera conjunta (complementaria) o en sustitución del tratamiento convencional (alternativa). Los hombres que padecen cáncer de próstata a menudo recurren a la MCA, como consumo de ciertos alimentossuplementos alimenticios o algunas hierbas como fuentes de antioxidantes. Existen diversos estudios clínicos que se han realizado para averiguar si el consumo alimentos o suplementos reduce el riesgo de padecer cáncer de próstata, destruye las células cancerosas o reduce el riego de que el cáncer vuelva a aparecer.

A continuación, ponemos una lista de alimentos y suplementos específicos recomendados por el sistema de consultas de datos médicos del INC (PDQ, por sus siglas en inglés):

  • Calcio
  • Té verde
  • Licopeno
  • Pectina cítrica modificada
  • Granada
  • Selenio
  • Soya
  • Vitamina D 
  • Terapias combinadas de suplementos que contengan granada, té verde, brócoli cúrcuma
  • Terapia combinada de licopeno, selenio y té verde
  • Terapias combinadas suplementos que contengan aceite de oliva con 10 hierbas romero, cúrcuma, jengibre, albahaca, té verde, fallopia japónica, raíz de coptis, agracejo, orégano y raíz de baikal

Para evaluar el efecto sobre el consumo de bioactivos y antioxidantes (sea como alimentos o en forma de suplementos alimentarios) se realizan estudios clínicos, es decir, estudios donde pacientes con cáncer o con bajo, moderado y alto riesgo consumen algún producto durante un tiempo determinado (desde meses hasta 20 años), con la idea de evaluar si hay alguna asociación entre la MCA y el cáncer. Hasta el momento, los resultados entre estudios no concuerdan entre sí que, en algunos casos, se ha reportado que tienen un efecto preventivo o protector, pero en otros no existe efecto alguno.  

El INC a través de PDQ establece, por ejemplo, que el consumo de tocoferol (vitamina E antioxidante) se relaciona con un riesgo más bajo de cáncer de próstata; sin embargo, otros estudios no encontraron relación entre el consumo de alfa-tocoferol y beta caroteno y el riesgo de cáncer de próstata en hombres a quienes se le dio seguimiento durante 19 años. 

Otro ejemplo es el licopeno, en donde hombres con riesgo intermedio de cáncer de próstata que consumieron productos con tomate presentaron menos valores de Antígeno Prostático Específico (PSA), que se emplea para medir de manera indirecta si un tratamiento es eficaz.

En un estudio de casos y controles sobre la ingesta de antioxidantes alimentarios y el cáncer de próstata en la población de Suecia, se llevó a cabo una recolección de datos a través de un cuestionario de consumo frecuente de alimentos (FFQ por sus siglas en inglés) y, posteriormente, a cada alimento reportado en el cuestionario se le midió en el laboratorio su capacidad antioxidante con el método de FRAP. Con los datos obtenidos se calculó el OR (razón de momios) que sirve para revisar la probabilidad de que ocurra un evento y permite asociar un patrón en conducta de la alimentación con el riesgo de cáncer. Recordemos que asociar no significa causalidad, es decir, no establece causas solo asocia. Los resultados mostraron que los alimentos antioxidantes más consumidos fueron caféchocolate, papa hervida, además que el 19% de la población consume vitaminas como suplementos alimentarios.

Sin embargo, el consumo de alimentos antioxidantes corroborado por la medición de FRAP, no se asoció con el riesgo de cáncer. Por otro lado, el consumo de suplementos de vitaminas presentó una asociación positiva con el riesgo de cáncer total, avanzado, localizado, alto grado y bajo grado de la enfermedad, comparando a los pacientes consumidores con los no consumidores. Un dato particular fue que una ingesta alta de café (más de 6 tazas por día) fue asociado con una posible reducción de riesgo de cáncer fatal y de alta severidad. Un caso similar se presentó con el chocolate para el riesgo total, avanzado, localizado y bajo grado de la enfermedad.

Decir que los antioxidantes curan el cáncer o lo previenen es aventurado e incorrecto, pues la complejidad de la patología y los factores propios de pacientes juegan un papel fundamental. Sin embargo, la evidencia científica índica que, durante el cáncer, los genes de las células se alteran y eso tiene como consecuencia que generen oxidantes como los radicales libres. El consumo de alimentos ricos en antioxidantes brinda un apoyo como un tratamiento complementario en la terapia contra el cáncer. Hablemos claro, los antioxidantes no curan el cáncer, pero protegen del estrés oxidativo que genera.

Bibliografía:

WHO, “Global Cancer Observatory,” 2022. [Online]. Available: https://gco.iarc.fr/. [Accessed 15 mayo 2022.

R. J. Rebello, C. Oing, K. E. Knudsen, S. Loeb, D. C. Johnson, R. E. Reiter, G. Silke, T. Van der Kwast and R. G. Bristown, “Prostate cancer,” Nature Reviews Disease Primers, vol. 7, no. 9, 2021.

B. Perillo, M. DiDonato, A. Pezone, E. Di Zazzo, P. Giovannelli, G. Galasso, G. Castoria and A. Migliaccio, “ROS in cancer therapy: the bright side of the moon,” Experimental and Molecular Medicine, vol. 51, pp. 192-203, 2020.

N. E. Herrera-González, F. Martínez-García and E. Mejía-Jimenez, “El efecto Warburg: la mano derecha,” Revista de Especialidad Médicas Quirúgicas, vol. 20, no. 2, pp. 171-177, 2015.

M. Bethesda, “Cáncer de próstata, nutrición y suplementos alimentarios (PDQ®)–Versión para pacientes,” Instituto Nacional de Cáncer, 4 Febrero 2022. [Online]. Available: https://www.cancer.gov/espanol/cancer/tratamiento/mca/paciente/prostata-suplementos-pdq.. [Accessed 18 Mayo 2022].

K. M. Russnes, E. Möller, K. M. Wilson and e. al., “Total antioxidant intake and prostate cancer in the Cancer of the Prostate in Sweden (CAPS) study. A case control study,” BioMed Central, vol. 16, no. 438, 2016.

Etiquetas

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *