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Las personas que consumen chocolate amargo diario (unos 25g) mostraron ser menos resistentes a la insulina, tuvieron una reducción en los niveles séricos de insulina y en las enzimas hepáticas.

La reducción de la resistencia y de los niveles a la insulina, la mejora de las enzimas hepáticas, forman parte de los resultados de un estudio transversal hecho por la Universidad de Luxemburgo, la de Warwick, la de Australia del Sur y la de Maine, en EE.UU., en el que se analizaron los datos de 1,153 personas de entre 18 y 69 años, con el fin de determinar la prevalencia de riesgo cardiovascular en Luxemburgo.

Delicioso y saludable

El consumo de chocolate amargo cotidianamente trae beneficios a la salud gracias a su contenido de nutrimentos como los flavonoides, que tienen una función antioxidante importante, además de ser considerados como anticancerígenos, cardiotónicos y reductores de los niveles de colesterol en sangre.

El chocolate amargo contiene más flavonoides que el té verde y el vino tinto. Por ello, puede ser un alimento favorable para personas con presión arterial baja, y también ser una fuente de antioxidantes en general.

Este estudio, tiene la limitación de ser transversal, lo que significa que los resultados solamente pueden hacer un estimado sobre los efectos del chocolate en la salud. Los investigadores han solicitado financiamiento para analizar más a fondo las propiedades de este producto.

Mejorando las habilidades del cerebro

El chocolate amargo mostró ser un buen aliado para mejorar la capacidad de atención, según un estudio conducido en la Universidad de Arizona del Norte (NAU) en EE. UU.

El estudio consistió en el análisis de las reacciones cerebrales de 122 personas, entre los 18 y 25 años de edad, mediante un electroencefalograma (EEG). El chocolate que se les dio durante la prueba era amargo y tenía 60% de cacao.

Los participantes en el análisis mostraron tener un aumento en la capacidad de atención después de comer chocolate. También presentaron un momentáneo aumento en la presión arterial, que regresó a la normalidad en poco tiempo.

Esto sugiere que el chocolate puede ser un estimulante positivo para contrarrestar el cansancio del día y mejorar las condiciones cerebrales al realizar tareas específicas como estudiar, manejar, etc.

El Dr. Larry Stevens, director del estudio, dice que “el chocolate es un estimulante y activa de manera especial al cerebro. Puede aumentar las habilidades de atención del cerebro y reducir los niveles de presión arterial [a la larga]”. De hecho, él se come un trozo de chocolate amargo sin azúcar, por la tarde todos los días.

El chocolate es un vasodilatador, es decir, expande los vasos sanguíneos, mejorando la circulación de la sangre. Por lo que en un largo plazo, ayuda contra la hipertensión. Sin embargo, por sus efectos estimulantes, de manera inmediata produce un aumento de la presión arterial.

Mejorando el chocolate

Stevens está investigando formas para potenciar los beneficios del chocolate. Por un lado, está analizando los efectos del chocolate amargo en comparación con el combinado con leche. Por otro, está probando adicionarle L-teanina, un aminoácido natural que se encuentra en el té verde.

La L-teanina es un relajante que baja la presión arterial y produce ondas alfa en el cerebro, que lo llevan a un estado de relajación. La apuesta de Stevens es que la mezcla de chocolate amargo y L-teanina, eliminarían la cualidad hipertensiva del primero y podría ser un alimento para combatir el estrés.

Con estos hallazgos, el chocolate deja de ser una simple golosina y se vuelve un alimento más saludable de lo que pensábamos. Es importante recordar que estas propiedades se encuentran en el chocolate amargo con al menos un 60% de cacao. Las combinaciones de chocolate con leche o blanco no tienen estos beneficios por la interacción de los otros elementos y el cacao.

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