En cada etapa necesitamos una dieta que vaya con nuestra edad y estilo de vida. Conforme crecemos y envejecemos, requerimos comer ciertos alimentos; las cantidades de estos también van cambiando.
Por ejemplo, después de cumplir 50 años, necesitamos menos cantidad de grasa y de azúcar porque, muy probablemente, nuestro gasto de energía es menor que cuando teníamos 20.
Dime qué haces y te diré si comes bien
El estilo de vida que llevamos determina qué tipo de alimentos requerimos y las cantidades. Si eres una persona sedentaria, necesitas menos energía que si haces actividad física constante. Lo bueno de esto es que puedes cambiar tu estilo de vida cuando lo decidas, de tal manera, que tu alimentación sea un combustible y no un obstáculo para tu salud.
Algunos de los alimentos que debemos reducir al acercarnos a los 50 años, son:
En cambio, los que debemos aumentar son:
Comer con madurez
Con la edad, no sólo cambian los alimentos que necesitamos, también la forma cómo los elegimos. Los intereses y preocupaciones sobre nuestra salud van tomando otra orientación. Según una encuesta realizada por el IFIC (Instituto Internacional de Información sobre Alimentos), los estadounidenses de 50 años o más tienen otros criterios para elegir qué comer.
A diferencia de gente más joven, los cincuentones confían más en sus decisiones sobre la comida, piden menos opiniones a sus amigos y familiares, y son más propensos a estar informados sobre nutrición.
Además, tienen más datos que les permiten relacionar ciertos alimentos con beneficios a la salud (como la fibra y la digestión). El interés por el control de peso baja, pero aumenta la preocupación por la salud cardiovascular.
Algunas de las cosas que son recomendables hacer al llegar al “quinto piso” son:
La forma como nos alimentemos puede influir mucho en cómo vivamos, en cualquier etapa de nuestra vida.
Fuentes:
http://www.foodinsight.org/articles/2017-food-and-health-survey-focus-50
https://www.nia.nih.gov/espanol/publicaciones/comer-saludablemente-despues-50-anos