Las almendras son una nuez muy popular. ¿Sabes por qué se recomienda comerlas y de qué manera?
Las almendras son una de las nueces que han ganado fama por brindar sustancias nutritivas que mejoran la salud cardiovascular. Pero, ¿qué tienen exactamente que nos dan esos beneficios?
Las almendras son ricas en vitamina E y contienen unos 130 polifenoles diferentes, que son sustancias con efecto antioxidante. Los antioxidantes tienen la propiedad de atrasar el deterioro causado por la oxidación.
Conservando la comida y la salud
Los polifenoles de almendra se usan como conservadores en algunos productos para aumentar su vida de anaquel, pero también son los compuestos que nos aportan beneficios a la salud.
Los antioxidantes, como los polifenoles y los flavonoides, ayudan al sistema cardiovascular porque contribuyen a reducir los niveles de colesterol. Cada 100g de almendras contienen aproximadamente los siguientes antioxidantes: 162mg de proantocianidinas, 82.1mg de taninos hidrolizables, 61.2mg de flavonoides, además de muchos otros en menores cantidades.
¿Cómo me las como?
Como es el caso de muchos alimentos, la forma como se consumen las almendras afecta la cantidad de antioxidantes que nos dan. Por ejemplo, comerlas sin cáscara o tostadas hace que obtengamos menos antioxidantes.
Consumir almendras en forma de bebida (la mal llamada “leche de almendras”), disminuye su contenido nutritivo, además de que puede traer algunas consecuencias negativas a la salud.
Pero regresemos a las ventajas de las almendras enteras. La piel de esta semilla tiene propiedades antivirales, antiinflamatorias y, usada en algunos productos cosméticos aumenta la protección contra los rayos UV A. Todo esto gracias a sus polifenoles. ¡Qué maravilla!
Por otro lado, muchos nutriólogos recomiendan comer como colación una porción de almendras (que puede variar entre 9 y 12 piezas), porque además de los antioxidantes, promueven la sensación de saciedad. Es importante no excederse en el consumo de almendras.
Encontrando mayores beneficios
Las investigaciones más recientes sobre la composición nutrimental de la almendra, sugieren que tiene efectos protectores, no solo a nivel del corazón, también en síndrome metabólico y la diabetes, además de contribuir a la modulación de lípidos (grasas) en la sangre, por su combinación de polifenoles, fibra y fitoesteroles.
Actualmente, se están realizando estudios para identificar un mayor número de polifenoles en la almendra, para así poder saber qué otros beneficios nos puede aportar. Esto será la base para nuevas recomendaciones de consumo de este fruto seco.
Fuentes: