Alimentación de la madre durante la lactancia: Porciones

Nut. Aurora Porrúa Ardura

Escuela de Nutrición

Universidad Anáhuac, Mayab

La lactancia materna es un proceso fisiológico fundamental que ofrece beneficios significativos tanto para el lactante como para la madre. Desde una perspectiva nutricional, es esencial comprender cómo las demandas metabólicas de la lactancia afectan las necesidades dietéticas de la madre. Este artículo explora la importancia de una dieta adecuada durante la lactancia, centrándose en la ingesta de micronutrimentos críticos, la personalización de la dieta y los efectos de ciertos alimentos sobre la calidad de la leche materna.

Requerimientos nutricionales durante la lactancia

La producción de leche materna incrementa el gasto energético de la madre en aproximadamente 500kcal por día. Además, se observa un aumento en la demanda de ciertos micronutrimentos para satisfacer las necesidades tanto de la madre como del lactante. Este incremento en la demanda de micronutrimentos genera un desgaste energético y nutricional que requiere un incremento en el consumo de porciones y en la ingesta dietética cuidadosamente balanceada de algunos nutrimentos, por ejemplo:

• Calcio: La transferencia de calcio a través de la leche materna puede afectar la densidad ósea de la madre si no se suplementa adecuadamente. Es por eso que se recomienda una ingesta diaria de 1,000mg, con fuentes clave como productos lácteos, tofu, brócoli y almendras.
• Hierro: La anemia en la madre es una preocupación común durante la lactancia. La recomendación esconsumir 9-10mg diarios de hierro, que pueden obtenerse de carnes rojas, legumbres, espinacas y cereales fortificados.
• Vitaminas A, D, E y K: Estas vitaminas liposolubles son críticas para la salud inmunológica tanto de la madre como del lactante. Las fuentes incluyen vegetales de hoja verde, cítricos, huevos y pescados grasos.
• Proteínas: Se recomienda una ingesta de 1.1-1.3g de proteína por kg de peso corporal para apoyar la síntesis de proteínas en la leche y así mejorar no sólo la calidad de la lactancia, sino también la nutrición de la madre. Las fuentes incluyen carnes magras, pescado, huevos y productos lácteos.
• Carbohidratos: Es sumamente importante tener en cuenta que los carbohidratos representan la principal fuente de energía y deben constituir el 50-60% de la ingesta calórica diaria. Las fuentes recomendadas incluyen cereales integrales, frutas y verduras.
• Grasas saludables: Aunque algunos piensan que son innecesarias, estas son esenciales para el desarrollo neurológico del lactante; se recomienda que las grasas constituyan el 25-30% de la ingesta calórica diaria. Las fuentes incluyen aguacates, nueces, semillas y aceites vegetales.

Personalización de la nutrición

Un tema fundamental de la nutrición es que debe de ser siempre personalizada y la dieta de la madre lactante no es la excepción, ya que debe de ajustarse además de a las características personales y metabólicas de la madre, a la producción de leche, la frecuencia de las tomas y la introducción de alimentos complementarios. Una evaluación individualizada por parte de un nutriólogo es crucial para asegurar una ingesta nutricional adecuada.

Factores a considerar

Algunos factores que son importantes a considerar para lograr una dieta adecuada, tanto en porciones como en nutrimentos, durante el tiempo que la madre esté lactando, son:

• Producción de leche: Las madres con alta producción de leche pueden requerir un mayor aporte energético y proteico.
• Frecuencia de las tomas: La demanda energética varía según la frecuencia y duración de las tomas.
• Alimentación complementaria: En el caso de lactantes que ya reciben alimentos complementarios, la madre puede necesitar ajustar su dieta para mantener un balance nutricional.

Impacto de los péptidos alimentarios

Ciertos alimentos consumidos por la madre pueden afectar la leche materna, alterando su sabor o causando reacciones adversas en el lactante. Algunos ejemplos son:

• Lácteos: Las proteínas de la leche de vaca pueden provocar reacciones alérgicas en lactantes sensibles.
• Alimentos picantes: Pueden cambiar el sabor de la leche y causar molestias gastrointestinales.
• Vegetales crucíferos: Como el brócoli y la col, pueden causar gases y malestar tanto en la madre como en el lactante.

Consejos prácticos para la alimentación durante la lactancia

Llevar una dieta adecuada es primordial en este periodo de tanto desgaste para la madre, pero no debería volverse una preocupación más. Por ello, a continuación, compartimos algunos consejos que pueden ser útiles para hacer la alimentación mucho más fácil.

• Planificación de comidas: La preparación de comidas balanceadas y ricas en nutrimentos es esencial para cumplir con las necesidades aumentadas durante la lactancia. Procura no dejar más de 5 horas sin ingerir alimentos y cuidar alimentación equilibrada e inocua. 
• Snacks saludables: Mantener opciones nutritivas como frutas, nueces, palomitas y yogur ayuda a mantener la energía.
• Supervisión nutricional: Consultar a un nutriólogo para personalizar la dieta según las necesidades específicas de la madre y el lactante.

La alimentación durante la lactancia requiere una atención cuidadosa a la calidad y las porciones de los alimentos consumidos. Un enfoque personalizado, supervisado por un nutriólogo, puede asegurar que tanto la madre como el lactante reciban los nutrimentos necesarios para un desarrollo y bienestar óptimos. La comprensión de los efectos de ciertos alimentos en la leche materna es esencial para evitar posibles reacciones adversas.

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